Yo no tengo miedo a volar. Me encanta volar. Siempre espero de un viaje ese momento de coger un avión. La sensación de ver todo desde arriba cada vez más pequeño o cada vez mas grande. Aun así, esta foto tomada recientemente en un vuelo comercial llegando a destino pone los pelos de punta. Sin comentarios. Os dejo a vosotros.