La croqueta

En una escena de la película Notting Hill, están un grupo de amigo delante de una croqueta, la última que queda en el plato. Y uno de ellos invita a todos a apostarse quien se come la última croqueta en un juego que consiste en contar la historia más triste de su vida… a ver quien está peor.

Yo ahora mismo tengo una croqueta delante, pero… quiero que se quede en el plato. Tendría que comermela yo, pero no quiero comermela porque voy a levantarme por mí mismo. Hay que encontrar lo que hace feliz a cada uno en la vida, porque no hay nadie que vaya venir a levantarte, cuando el que se tiene que levantar es uno mismo. Aunque sea lo más mínimo, un animal de compañía, un pequeño hobby o uno grande que te haga incluso volar.

Es muy fácil escuchar los "sal por ahí" o "conoce gente", cuando lo que realmente uno necesita es mirarse hacia dentro, y sin rozar el pasado, tocar las ilusiones que te hagan sonreir y completar el día a día. No tener tiempo de pensar y estar concentrado en lo siguiente que se quiere hacer. Planearse o vivirlo a 'tiempo real', pero no quedarse parado. Es muy jodido y fastidia mucho tener 'una croqueta' delante tuyo y tener que disputar por ella. Nadie te va a comprender mejor que tu mismo. Pero no analices, no pienses, ¡corre!.

Cuando se hunde todo 'a la vez' y no tienes en donde apoyarte, el único que te va a salvar eres tú mismo. Las croquetas son para los perdedores, para los soñadores del pasado y para los que se conforman. El día tiene 86400 segundos (¿recuerdas el por qué de este blog?) y cada uno de esos no se repite jamás… Sonríe, pues cada sonrisa te hace estar mejor y por ende a todo tu entorno. Los que te rodean sentirán acercarse con más ánimo si creas tus propias buenas vibraciones.

GRACIAS Köre y Dyn