No es malo conocer respuestas que no queremos conocer… es bueno conocer la realidad donde uno vive y poder enfrentarse a ella.
No es malo saber que te dan la espalda y no cuentan contigo… es bueno saber el camino correcto que uno tiene que andar para seguir viviendo.
No es malo enterarte de que has fallado a un amigo… es bueno saber que él puede perdonarte.
Pero, ¿y que pasa cuando el que nunca te falló te falla, las respuestas de aquellas preguntas te matan, no cuentan contigo y has fallado a alguien?
Dicen que la huella de la amistad nunca se borra y que nunca es largo el camino que conduce a casa de un amigo.