[su_wiloke_sc_company_website]Estoy muy decepcionado. Me entristece cómo se está llevando lo que hoy en día puede que sea el concurso más popular de blogs en España, los Premios 20blogs de 20minutos.
Tan triste estaba que he decidido llamar a 20 minutos para hablar con un responsable del concurso, y he tenido el placer de poder hablar esta tarde con Nacho Rojo, redactor jefe del periódico y unos de los responsables del concurso.
Lo primero que he hecho es exponerle el problema que está habiendo con este concurso. Principalmente se basa en el mercadeo de votos que está surgiendo apoyándose en una de las bases del concurso, que permite realizar votos cada día, además de que este mercadeo está originado implícitamente por una de sus reglas más controvertidos: sólo se pueden votar personas que tengan un blog inscrito en el propio concurso.
Realmente, tal y como hemos llegado a la conclusión los dos, no hay forma de realizar un control exhaustivo, legal y correcto del número de votos sin que haya algún agujero. Qué cierto es en nuestro país la frase «hecha la ley hecha la trampa». Si se decidiera realizar un voto por IP (número de identificación de nuestra conexión en Internet, que es único), los «tramposos» simplemente optarían por resetear el router de conexión para obtener una IP nueva (pasa en todas las conexiones con IP dinámica). Si incluso se decidiera votar con DNI (letra incluida) los «tramposos» simplemente generarían números de DNI con el algoritmo bien conocido para ello… y así un largo etcétera de posibles reglas para controlar los votos, y su consiguientes trampas.
Ciertamente es muy complicado realizar un concurso con votaciones, pero lo que sí es cierto, es que al menos, la IP siempre ha sido una de las reglas para poder jugar en una recolecta de votos, y sin duda otra de las características comunes en casi todos los concursos de «mejores páginas Web» de algo ha sido el voto único, es decir, no sé a qué viene la posibilidad de poder votar diferentes cosas cada día. Esto tampoco me lo ha sabido responder Nacho Rojo.
Me comentaba eso sí, que al menos las reglas de este año son un punto medio entre el «cachondeo» que hubo el año pasado y lo tajante que podría llegar a ser pedir IP, o DNI o vetar de alguna forma más el control de votos. Como le he dicho yo, que se haya «mejorado» respecto al año pasado no quiere decir que éste año haya sido justo para los blogs.
Bueno, Alex… ¿y tanto que dices de que está mal el concurso por qué no nos das una idea de como hacerlo?
Cierto. No soy la voz de la razón y mucho menos he de tener razón pero sí que se me ha ocurrido una idea. Este concurso debería ir centrado en encontrar blogs nuevos. Me voy a ingresar en el grupo de los Top100 blogs según las estadísticas de top.blogs.es, Alianzo o Emezeta (que son las principales referencias de listas top de blogs en España), y siendo uno de los 100 voy a comentaros esta forma.
Para saber «qué blogs son los mejores» en cuestión de visitas, popularidad, enlaces y demás variables que entran en el logaritmo de cada ranking, simplemente hay que mirar dichos rankings, es decir, yo, sin tener que entrar en concursos de 20minutos u otros similares, sé que aproximadamente mi blog (viendo esos rankings) está por el puesto 50 o 60 de la lista. Y punto.
Pero lo que deberían ser estos concursos es para conocer nuevos blogs, pues los mejores ya los tenemos gracias a complejos algoritmos de variables que realizan los rankings. Lo importante sería conocer los «nuevos mejores», y por tanto, se debería de realizar un concurso en el que las votaciones las hagan los «actuales mejores». Me explico algo mejor:
Se podría realizar un concurso en el que el jurado son los (por ejemplo) 200 mejores blogs sacados de las medias de los principales rankings de blogs en España. Luego por otro lado, se podrían inscribir los blogs que quisieran (lógicamente, ninguno de estos 200), y que los responsables de estos mejores blogs pudieran votar a (por ejemplo) 5 blogs poniéndoles con 10, 8, 6, 4 y 2 puntos (por ejemplo de nuevo).
De esta forma se darían a conocer realmente blogs interesantes y nuevos, no habría mercadeo de puntos, no habría trampas y no tendría que haber gente que gaste cada día minutos de su tiempo libre (o incluso de trabajo) para rascar «amigos» de todas partes y negociar puntos y votos para conseguir que, su blog, que ni lo actualiza ni tiene contenidos de calidad, salga a ganar un premio que ni se merece, pero bien merece todo ese mercadeo y trampas.
Yo por mi parte, una de las cosas que he hablado con Nacho y que ahora públicamente dejo constancia en mi blog es que no quiero formar parte de un concurso que está totalmente amañado por el «lado oscuro» de la blogosfera, que al fín y al cabo es el lado oscuro de los usuarios de Internet, porque desgraciada y lógicamente, la blogosfera imita a la sociedad también, y si en la sociedad alguien «mata» por conseguir 3000 euros de premio, por qué no lo iba a hacer también en el mundo digital.
De ahí que os pida que no me votéis más en el concurso de 20blogs, y que si por algún casual, ganara el concurso (que bien dudo), desde aquí dejo constancia de que no querré el premio y que los 3000 euros los donaré a cualquier organización de apoyo al tercer mundo. No quiero el dinero ni el galardón de un concurso que está mal diseñado y que del que se están aprovechando algunos individuos para ensuciar la blogosfera y no permitir que los blogs que realmente se merecen un premio o un reconocimiento no puedan optar a ello, y precisamente no hablo por el mio.
Espero que tenga el placer de poder charlar de esto en algún momento con Ricardo Villa, subdirector de 20minutos y máximo responsable del concurso, con el que desgraciadamente, tras varios intentos en los últimos días no pude hacerlo, aunque al menos Nacho me escuchó y tuve una conversación muy agradable con él.
Un saludo a 20 minutos desde aquí por el intento de concurso que desgraciadamente no salió bien el año pasado y no está saliendo mucho mejor este año, y que, en principio no tiene ninguna culpa de este desastre y de que tramposos se apoderen de él, aunque les pido desde aquí que lo piensen más detenidamente para posteriores ediciones.