Viajando por Teruel (que existe, sin duda, y tiene sitios preciosos) me encontré con esta belleza del pasado. Yo creía que estaban ya obsoletas y recicladas pero todavía quedan algunas pocas sobreviviendo por la geografía española. Esta en concreto está en Pancrudo, un pequeño pueblo en el corazón de la provincia, en cuyo bar se puede ver todavía la existencia de una cabina telefónica de las de antaño.
El teléfono, eso sí, ha sido renovado, por un glorioso Domo, que sin duda protagoniza la avanzada tecnología respecto a su contenedor. Nada más entré en el bar fue un flashazo. Que tiempos cuando las cabinas eran así, ¿verdad? Qué lástima que el teléfono no hubiera sido de los antiguos, con los que era muy fácil realizar llamadas gratuitas, había 1000 formas… que tiempos … :)
