[su_wiloke_sc_company_website]En estos tiempos que corren, donde la promoción inmobiliaria ha sufrido una grandísima desaceleración, las pobres comerciales que tienen que vender pisos de primera mano, ya no saben qué hacer o decir, para atraer la atención del cliente y vender, en algunos casos deseperadamente y a por todas, con tal de no tener que oir las quejas de sus jefes, que por cierto, son los culpables de esta situación por poner los pisos tan (cada vez más) caros.
Resulta que viendo un piso que era de estos típicos unifamiliar, de dos plantas, se comentó sobre lo grande que era el salón y la distribución de las habitaciones, con la dificultad que eso conllevaba para enfriar el habitáculo y el calor que podría hacer en verano. Se empezó a hablar del aire caliente, que obviamente, al subir, calentaría demasiado el piso de arriba.
La comercial, ni corta ni perezosa, declaró que eso no era problema… porque el aire caliente sube y también baja. No contenta con esta pequeña respuesta errónea de Trivial, al intentar hablar sobre el viento que hacía en Zaragoza (conocida por su famoso cierzo), comentó que eso tampoco era problema, ya que en Zaragoza no hace viento, y por eso la base militar se había instalado aquí, porque esta ciudad era idónea por su falta de viento.
Bueno… no dijo más burradas en la visita, pero supongo que los siguientes clientes seguirían escuchando desesperadas respuestas… con tal de vender…
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