[su_wiloke_sc_company_website]En este video, el juez Calatayud Pérez nos da una lección magistral de nuestro fallos en cuestión educativa para con los jóvenes y menores de este país. Recomiendo encarecidamente ver los 20 minutos de su sesión porque todo lo que dice vale oro. Ojalá pudiera votar a este señor como Ministro de Educación u otro cargo similar en mi país.
En España todavía tenemos el miedo a decir un «no». Como somos tan democráticos todavía nos da miedo pensar el «que dirán» si nos ponemos un poco fuertes y aplicamos las leyes como hay que aplicarlas. Y me viene a colación ahora el tema de la quema de banderas y de la foto del rey que «tan de moda» se está poniendo ahora.
No me considero monárquico, pero tengo un respeto al Rey, que aunque no es MI rey y me ha venido impuesto por una línea sucesoria histórica, es la imagen que representa la corona y la monarquía que todavía está presente en mi país conviviendo (como puede) con la democracia. Al que roba unos cangrejos en una laguna protegida (como bien dice el juez en el video) le caen dos años porque es delito contra la fauna, pero al que quema fotos del rey (que también es delito tipificado) sale en televisión y no paga ni multa ni cárcel. ¿Por qué? Porque tenemos miedo a decir «no, hasta aquí hemos llegado». Si a este individuo se le hubiera multado convenientemente, ahora no tendríamos a media España diciendo «soy antimonárquico» porque se ha convertido, como decía, en una moda.
A los españoles siempre nos pasa lo mismo. Si no se puede hacer una cosa por ley y alguien la hace y no es multado, todos nos ponemos a hacerla como borregos sin pensar en lo más mínimo en la acción hecha y el por qué de dicha acción, y sólo preocupándonos de hacer ruido conjunto.
Pues lo mismo está pasando con la educación de los menores en este país, que aprovechando que son menores se están tomando demasiados derechos que no tienen y obviando los deberes que si tienen. Este juez, como digo, nos suelta un «speech» que es merecetorio de nuestro tiempo y nuestra reflexión, porque en España nos falta, entre otras cosas, la capacidad de saber lo que es una democracia y aplicarla con las leyes estipuladas.
También nos recuerda lo débiles que somos en cuestión colaborativa entre instituciones, y que aquí cada uno va como le da la gana, sin contar con los demás, y ejerciendo sus labores indiscriminada y desmesuradamente. Parece que los colegios sólo son cajas de madera donde se recitan libros, en lugar de donde se educa a una persona. Parece que la policía sólo multa y ejerce autoritarismo cuando debería proteger y salvaguardar al menor. Parece que la Sanidad sólo evita embarazos prematuras cuando debería apoyarse en el resto de instituciones para colaborar en la educación global de un menor. Y lo peor, los padres, que parece que ahora deben ser colegas de los hijos, cuando deberían ser los responsables directos del pasotismo que alimenta la independencia de los jóvenes que cada vez toman «la democracia» como arma defensiva más que como estado de derecho y bienestar social.
Por favor, el video es impecable… Echadle un ojo
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