[su_wiloke_sc_company_website]Estos día se está hablando mucho sobre la contaminación en China a raíz de sus Juegos Olímpicos de Beijing. Pero creo que es necesario que de vez en cuando veamos la realidad del lugar en donde vivimos, o sea que nos miremos el ombligo. Según he leído en Público, 20 millones de españoles respiramos aire contaminado, eso quiere decir que más de la mitad de los españoles respiramos aire contaminado, según un informe de Ecologistas en Acción, que estos días se está dando mucha difusión.
«La polución en el aire que respira el 53% de los españoles supera los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud”, asegura la ONG Ecologistas en acción, que ayer presentó en Madrid su informe sobre la calidad del aire en España durante 2007 .
Es necesario recordar el precio a pagar por dicha contaminación es la muerte prematura de más de 16.000 personas al año, eso significa la pérdida de esperanza de vida, según datos del Ministerio de Medio Ambiente.
La principal causa de la contaminación es el tráfico, aunque “también hay que destacar la influencia de determinadas instalaciones industriales” señala la citada ONG.
¿Cuál es la zona más contaminada de España? Por comunidades, los habitantes de Madrid son los más afectados: el 80% de los ciudadanos respira aire contaminado, dice la ONG.
A Madrid le sigue Extremadura, donde el 70,5% respira aire contaminado, País Vasco (67,1%), Cataluña (64,3%), Asturias (63,2%), Cantabria (58,5%), Murcia (55,7%), Aragón (50,4%), Andalucía (49,02%), Comunidad Valenciana (30,5%), Castilla y León (27,5%), Navarra (21,4%) y Castilla-La Mancha (19,6%).
Los efectos de la contaminación atmosférica se traducen normalmente en pérdida de esperanza de vida, que en el caso de los madrileños se puede cifrar entre tres meses y dos años. El número de muertes prematuras causadas por la mala calidad del aire se va a multiplicar por cuatro en las próximas dos décadas, si no se hace nada pronto para frenar la degradación del medio ambiente.
Ecologistas en Acción viene denunciando de forma reiterada la superación de los valores límite desde el año 2002, cuando entró en vigor. parece ser que los poderes públicos siguen haciendo la vista gorda frente a este serio problema.
¿Cuál es la solución? La solución sería reducir la cantidad de vehículos en circulación, así como su velocidad, e impulsar las energías renovables y por supuesto obligar a pagar a quien contamine.
¿Qué estamos dispuesto a sacrificar para que nuestro aire no termine por matarnos?
Escrito por: Toni (Cosas Sencillas).