[su_wiloke_sc_company_website]Una de las espinitas que me quedó cuando fui a Nueva York (además de no poder ver las Torres Gemelas) es no haber podido tocar el piano que Tom Hanks en la película «Big» disfrutaba en una de las tiendas de juguetes más famosas del mundo: Fao Schwarz.
Además, el año siguiente al que fui lo pusieron otra vez. Ahora hay empleados o atrevidos que se dedican a interpretar otras canciones además de aquella tan famosa de Hanks, que hizo mundialmente conocido este organo.
En esta ocasión una impresionante puesta en escena de la Tocaya y Fuga de Bach: