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Odio al tio que corta las películas

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[su_wiloke_sc_company_website]Las películas están para contar una historia y a su vez provocar una serie de sentimientos al espectador. Acabo de ver World Trade Center en la televisión. Ya la había visto. No cuento nada nuevo porque la historia ya la sabemos todos. Cuentan cómo sacan a dos de los 20 supervivientes bajo los escombros tras el hundimiento de las torres gemelas el fatídico 11 de septiembre de 2001.

Como decía, Oliver Stone, cuando hizo esta película supongo que quería provocar ciertos sentimientos al que la vea, sobre todo en los momentos finales, cuando están sacando a uno de ellos por fín, viendo la luz de fondo, haciendo símil a cuando uno está a punto de morir y «dicen» que se ve una luz. El cómo lo rescatan y lo llevan de nuevo a la vida, y justo en el momento en el que el actor principal está a punto de superarse a sí mismo, justo en ese preciso momento … ¡PLAF! ANUNCIO DE ADSL DE TELEFONICA.

¡A tomar por culo el sentimiento de toda la película! ¿Pero quien co***** es el responsable de cortar las películas? ¿Lo hacen a mala leche queriendo o es aleatorio? Es frustrante. Luego, tras 15 minutos viendo detergentes, coches, móviles, y otros productos «que no venden para otras marcas», vuelves otra vez al emotivo momento de la película donde estaban sacando al protagonista que se había debatido entre la vida y la muerte.

¡Que narices! Ahora ya no están sacando a un policía que ha estado 20 horas sepultado bajo los escombros y con el que te has solidarizado durante hora y media anterior, sino están sacando a Nicolas Cage, porque la peli sólo le quedan 5 minutos para que acabe y tu tienes más en la cabeza el dentífrico o elixir de turno, que el sufrimiento del pobre policía.

Que ganas tengo de que la TVE se le gasten los cartuchos de publicidad que tiene, ya que, aunque por ley ya no puede contratar más publicidad desde el 1 de septiembre, todavía (eso dicen) tenían ya contratada publicidad hasta Navidad. En fin …

Que ganas (más todavía) tengo de que me traigan mi nueva tele con el reproducto de BlueRay para poder ver las películas más a gusto en mi sofá, y poder sentir lo que el director quiere que sintamos con cada una de ellas, y poder evadirme del mundo y centrarme en la verdadera historia de los protagonistas, y no en la de la mente involuntaria de un consumidor más.

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