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Los azucarillos alargados del café

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[su_wiloke_sc_company_website]Con tintes de leyenda urbana os voy a contar una de esas cosas que me contaron a mi en un café. En algunos bares se sirven los cafés con azucarillos alargados en lugar de los envoltorios rectangulares clásicos, como se puede ver en la foto. Cuenta la «leyenda» que el tipo que los inventó se suicidó porque no consiguió que su invento fuera utilizado como el quería.

Yo personalmente no me lo creo pero detrás del dudoso desenlace del susodicho se encuentra una explicación para la forma de estos azucarillos que si que es más plausible.

Los azucarillos normales (los de la forma rectangular) suelen ser agitados cogiéndose de un lado para empujar todo el azúcar hacia el lado opuesto, de forma que cuando lo abramos por el lado que lo hemos cogido para agitarlo, se pueda desprender del envoltorio la mayor cantidad de azúcar.

Para evitar el meneillo de este tipo de envoltorios, se ideó el azucarillo con esta forma, pero no para hacer el mismo movimiento sino para evitarlo. Con este envoltorio alargado simplemente hay que partir por la mitad como si fuera un palo de madera, de forma que el azúcar de ambos lados caiga por la ruptura del papel en mitad.

Al ser de forma cilíndrica, no tener esquinas muy cerradas y partirlo por la mitad sin que nuestros dedos agarren azúcar en las esquinas del envoltorio, el azúcar no se queda en un lado y se sigue vertiendo la máxima cantidad de azúcar al café.

¿Y por qué se suicidó (supuestamente) el creador de este envoltorio? Porque si os fijáis, en los sitios donde se pone este cilíndrico azucarillo, la gente sigue agitándolo por un lado y usándolo como el azucarillo estándar, matando el concepto por el que se inventó.

Lejos de creerse el suicidio, o que incluso, al inventor le importe dos pepinos la forma en que se use su invento con tal de haber cobrado por él, la explicación de este tipo de azucarillos es interesante, y seguro que la próxima vez que los veáis, si no lo habéis abierto por donde se debe (por el centro) os acordaréis de este artículo y podréis explicarlo a vuestro compañero de cafés.

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