Me acuerdo la primera vez que ví esta máquina en mi vida. Era 2002, en Inglaterra, en Brighton. Era el centro de ocio de la ciudad y la ví con extrañeza. La gente ya sabía bailar sobre ella y yo era un patoso. Poco a poco esta máquina se ha ido haciendo famosa hasta tener a verdaderos artistas sobre el tablero que no sólo con los pies son capaces de llevar el ritmo de la canción. Un ejemplo lo podemos ver ...