En caso de una tormenta eléctrica, si estamos en un coche, no deberíamos abandonarlo. Parece de primeras lógico pensar que las gomas de los neumáticos al estar conectadas a tierra, serían capaces de traspasar la energía de un posible impacto de rayo sobre nuestro vehículo, de la misma forma que pasa cuando tocamos accidentalmente un cable eléctrico cargado con un dedo y disponemos de buenas suelas de ...